Su Mercé El Director

Por: El Director

Nombre: Juan Andrés Sinisterra A.K.A.: “El Director” Profesión: Publicista Afición: Computadores Jovy: Computadores Pasatiempo: Computadores ¿Trabaja?: Sí ¿Con Que?: Con Computadores!

Ahora no vaja creer que yo nací boqueto, boquinche, labiempinao o con la jeta torcida. No su mercé, yo desde niño siempre fui un querubín; la foto es un montaje, pilas. Ah bueno, calvito?, eso sí!

Claro que yo disque de pelao era mas feo quiun sapo. Mi abuela decía: “¿Maria Sol?, eso es la belleza echa mujer, con esos ojazos negros espectaculares tan divinos y esa sonrisa tan linda que tiene!. ¿Juan Ramón?, noh!, divino ese mono, que tal la herrrmosura de cachetes que lián salido a ese mujacho. ¿Isabella?, ni se diga, de ataque! Heredó mejor dicho la belleza de sus padres!. ¿Juan Andrés?, Juan Andreees… él se les compone, él se les compone!”

Que tal ah?, antes es que se cría uno! Seee, ha sido duro crecer con ese peso… En fin, hola, mucho gusto, como está, me place verte, etc etc. Mián citao acá en los Headquarters del Esporiódico para contarte quién soy yo. Llevo HORAS esperando al presidente para la entrevista pero no ha venido aun, y eso que quedamos en vernos aquí a las tres! (…siempre llega tarde). Mientras llega te voy contando 2 cositas:

La Primera: El Director

Hace 36 diciembres mis progenitores tuvieron la sensacional idea de bautizarme “Juan Andres”. Claaaro claro, una herrrrmosura de nombre, como no, yo también estoy de acuerdo, gracias, gracias.

Luego de terminar bachillerato me fui a prestar servicio militar en el BAGUP (Batallón Guardia Presidencial), donde me desempeñé proficientemente en la banda de guerra y adquirí amplios conocimientos en el arte del toque de la Lira en FA Mayor, labor muy importante para el crecimiento espiritual y el amor a la patria.

Al recobrar mi vida de civil me metí a estudiar Arquitectura, pero me aburrí en el segundo semestre y renuncié 5 segundos antes que solicitaran mi retiro. Claro que aprendí un toque de dibujo, expresión y algunos otros conceptos, pero esa es otra historia. Luego incursioné en los misterios de la urdimbre y la trama en la hidalguía de los textiles; ahí si me pegué una aburrida la berraca!

Finalmente unas amigas muy queridas me dijeron que la carrera de Publicidad era bacanísima, miré en que consistía el asunto, me gustó y arranqué a estudiar. Allí fue donde encontré todas las pasiones artísticas que le dieron sentido a mi existencia…

Resumidito, porque me tengo que ir! Al graduarme me metí a trabajar en una agencia de publicidad, luego monté mi negocio, lo cerré para irme a estudiar inglés a USA, al regresar trabajé con mi hermana en una Not… (ay!), luego monté un taller creativo de publicidad, cerré el taller para gerenciar una empresa de computadores, luego sus dueños la cerraron porque se fueron a trabajar a USA, entonces me les moquié para buscar chanfa allá… y encontré chanfa SI pero sponsor NO, entonces me devolví, trabajé de nuevo con mi hermana en la Oficina de Servicios Públicos (la mejor Notar… auch!), y por último estoy gerenciando una firma de Diseño Digital de la cual soy socio. Pufff, que paseíto nooo?, de todo se aprende en esta vida.

Pst, jey!, venga le digo… pero chito!. Es que no se puede hablar de la Notaría Catorce (que es la mejor) en medios masivos (es prohibido). Pero paqué, esa Notaría es lo máximo! Y le dan tinto a uno y todo!

¿Dónde íbamos?, ah sí, pues que en esas volteretas nació el Esporiódico, lo que me lleva a contarte…

La Segunda: El Tachenko
(andáte pa’ la dos…)